Luz en la calle

12:44 VDDP 0 Comentarios

28 Junio 2011



Hubo un tiempo en que creí que las voraces fauces de la melancolía acabarían conmigo, tiempo que la soledad aprovechaba para apuñalarme entre las gélidas sabanas de mi cama, donde cada minuto sin rozar un poro de su piel alargaba la distancia hacia el olvido...
Ahora he vuelto a hallar una escapatoria, volví a encontrar un soplo de felicidad.

Era una cálida noche de junio en la que me encontraba vagando sin rumbo por las tristes calles de una ciudad gris, torcí la esquina y el sentido de mi existencia cambió drásticamente, ahí te encontrabas tú, paseando bajo la luz de una farola, con el cielo estrellado de fondo y la brisa veraniega agitando tu pelo castaño, fue como si el tiempo se ralentizara y jamás podré quitarme esa imagen de la cabeza. Formando un sentimiento nuestras miradas se cruzaron y el destello que tus ojos producían era comparable con el más bello de los amaneceres… te aproximaste a mí, lentamente, mientras tu cuerpo se contoneaba al compás de tus pasos, tus curvas…esas curvas que me vuelven loco y me hacen alucinar se acercaban cada vez más, soñaba despierto con acariciar tu cuerpo, con tener esa Sonrisa Precisa a mi lado cada vez que despertara, hasta entonces no había tenido ni estrella ni princesa que me acompañase en mi locura…pero ahí te tenía a ti, a menos de cinco pasos de distancia y con tu mirada clavada dentro de mi ser, sacudiéndome el corazón como un rayo que ilumina la oscuridad durante la tormenta que es mi vida… como un rayo que ilumina mis más oscuras noches de pena…
Me comía los cojones día tras día, pero aún no había encontrado la mejor manera ni el mejor momento para decirte lo que siento. Te paraste frente a mí, creí que era el momento indicado, las distancias se hacen cortas cuando quiero medir lo que separa el  mundo de los dos, pero tú te adelantaste...desde entonces, solo quiero comerte a besos.

DDP